El Juego había vuelto a empezar. Felicidad en estado puro, bruto, natural, volcánico..¡Qué gozada! Era lo mejor del mundo. Mejor que la droga, mejor que la heroína, mejor que el costo, coca, crack, chutes, porros, hachís, rayas, petas, hierba, marihuana, cannabis, canutos, anfetas, tripis, ácidos, LSD, éxtasis. Mejor que la nocilla y los batidos de fresa, mejor que la trilogía de Stieg Larsson, que la serie completa de El Internado, que el fin del milenio. Mejor que la libertad. Mejor que la vida. Tú.
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